Identificación de la Fuente: El primer paso es identificar la fuente del olor. Esto puede requerir una inspección cuidadosa para determinar si el olor proviene de algo en descomposición, humedad, o cualquier otra causa.

Selección de la Técnica Adecuada: Una vez que se identifica la fuente, se elige la técnica de neutralización adecuada. Esto puede incluir el uso de productos químicos neutralizantes, ozono, filtración de aire de alta eficiencia o sistemas de difusión de fragancias diseñados específicamente para combatir olores.

Descomposición de Moléculas: La técnica seleccionada trabaja descomponiendo las moléculas de olor en componentes no ofensivos, o simplemente eliminando las moléculas del aire.

Eliminación de la Fuente: En algunos casos, la eliminación completa de la fuente del olor, como el moho o los desechos en descomposición, es necesaria para evitar la recurrencia del problema.